Empezar de cero siempre es difícil. Y si decides buscarte la vida lejos de tu país, el día a día puede resultar de lo más abrumador. Es el caso de Alin Mihu, un rumano de 33 años que quiso compartir recientemente su historia al medio Anuntul UK, enfocado a la población rumana y moldava residente en Reino Unido.. Después de más de diez años trabajando en como camionero para empresas destacadas en el sector del reparto (Amazon, Eddie Stobart, Hermes, etc), Mihu decidió volver a su Rumanía natal. De primeras, este gran paso puede sorprender a quienes no conozcan su historia, ya que el repartidor ganaba la friolera de hasta 200 libras al día.. Permitirse volver a empezar. Una vez de vuelta en Rumanía, Alin ha utilizado el dinero que ahorró trabajando en Reino Unido para comprar un terreno en el condado de Gorj, situado al suroeste del país. El futuro de este terreno no ha tardado en decidirse: el otrora camionero quiere abrir su propia granja de codornices.. «Renuncié a las ganancias que tenía allí para cumplir un sueño en Rumanía», declaró Alin al citado medio. La inversión de este nuevo negocio, que implica gastos en el terreno, la construcción de la nave y la crianza de la primera generación de codornices de la granja, superó las 50.000 libras.. A pesar de todo, el emprendedor lo tiene claro: quiere que su granja se convierta «en una de las más grandes del país». Si bien reconoce que el nivel de vida era superior en Inglaterra, para Alin no hay nada como la tierra que le vio nacer: «Mi lugar está aquí, entre las colinas, al aire libre», sentencia.
Alin llevaba más de diez años trabajando en Reino Unido, pero abandonó su país de acogida apostar por un proyecto con el que llevaba tiempo ilusionado
Empezar de cero siempre es difícil. Y si decides buscarte la vida lejos de tu país, el día a día puede resultar de lo más abrumador. Es el caso de Alin Mihu, un rumano de 33 años que quiso compartir recientemente su historia al medio Anuntul UK, enfocado a la población rumana y moldava residente en Reino Unido.. Después de más de diez años trabajando en como camionero para empresas destacadas en el sector del reparto (Amazon, Eddie Stobart, Hermes, etc), Mihu decidió volver a su Rumanía natal. De primeras, este gran paso puede sorprender a quienes no conozcan su historia, ya que el repartidor ganaba la friolera de hasta 200 libras al día.. Una vez de vuelta en Rumanía, Alin ha utilizado el dinero que ahorró trabajando en Reino Unido para comprar un terreno en el condado de Gorj, situado al suroeste del país. El futuro de este terreno no ha tardado en decidirse: el otrora camionero quiere abrir su propia granja de codornices.. «Renuncié a las ganancias que tenía allí para cumplir un sueño en Rumanía», declaró Alin al citado medio. La inversión de este nuevo negocio, que implica gastos en el terreno, la construcción de la nave y la crianza de la primera generación de codornices de la granja, superó las 50.000 libras.. A pesar de todo, el emprendedor lo tiene claro: quiere que su granja se convierta «en una de las más grandes del país». Si bien reconoce que el nivel de vida era superior en Inglaterra, para Alin no hay nada como la tierra que le vio nacer: «Mi lugar está aquí, entre las colinas, al aire libre», sentencia.
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