Las ciudades son sus plazas, sus parques, sus rincones con encanto y sus comercios de referencia; uno de ellos en Alicante es la librería 80 Mundos, la más antigua de la ciudad. Abrió hace 43 años. Es un lugar con encanto en el que es un placer pasear entre sus estanterías, escrutar las novedades literarias y dejarse llevar por el olor a libro sin estrenar.. La noticia de que cerrará sus puertas es un hachazo para los amantes de la literatura y para la ciudad. Máxime porque ese edificio, ubicado en el número 14 de la Avenida de General Marvá -entre la plaza de los Luceros y las escalinatas del Instituto Jorge Juan, otras dos referencias en Alicante- se convertirá en un bloque de apartamentos turísticos.. De hecho, el cierre de 80 Mundos es consecuencia de la compra del inmueble por los nuevos propietarios y de su proyecto. Donde había un espacio para la cultura, la creación literaria y el pensamiento, habrá un símbolo del capitalismo más atroz. Ese que devora sin piedad las señas de identidad de las ciudades y que en la cúspide de su escala de valores tiene el dinero como único Dios.. Que Alicante y la Comunidad Valenciana son turismo es innegable; el turismo es el motor de la economía; algo que no está reñido con la necesaria regulación de los pisos turísticos.. Por suerte, en Alicante, el Gobierno Local ha emprendido una cruzada para poner coto a los pisos turísticos, con una moratoria en la concesión de licencias y con el cierre de aquellos que no cumplan con la legislación vigente.. Es posible que el proyecto cultural de 80 Mundos perviva en otro local de la ciudad; sus propietarios dicen que no se rinden.. Pues eso, que perder un espacio para la lectura, la escritura y la cultura es, sin duda, un drama. Tanto como perder los edificios de viviendas, los de toda la vida.
Perder un espacio para la lectura, la escritura y la cultura es, sin duda, un drama
Las ciudades son sus plazas, sus parques, sus rincones con encanto y sus comercios de referencia; uno de ellos en Alicante es la librería 80 Mundos, la más antigua de la ciudad. Abrió hace 43 años. Es un lugar con encanto en el que es un placer pasear entre sus estanterías, escrutar las novedades literarias y dejarse llevar por el olor a libro sin estrenar.. La noticia de que cerrará sus puertas es un hachazo para los amantes de la literatura y para la ciudad. Máxime porque ese edificio, ubicado en el número 14 de la Avenida de General Marvá -entre la plaza de los Luceros y las escalinatas del Instituto Jorge Juan, otras dos referencias en Alicante- se convertirá en un bloque de apartamentos turísticos.. De hecho, el cierre de 80 Mundos es consecuencia de la compra del inmueble por los nuevos propietarios y de su proyecto. Donde había un espacio para la cultura, la creación literaria y el pensamiento, habrá un símbolo del capitalismo más atroz. Ese que devora sin piedad las señas de identidad de las ciudades y que en la cúspide de su escala de valores tiene el dinero como único Dios.. Que Alicante y la Comunidad Valenciana son turismo es innegable; el turismo es el motor de la economía; algo que no está reñido con la necesaria regulación de los pisos turísticos.. Por suerte, en Alicante, el Gobierno Local ha emprendido una cruzada para poner coto a los pisos turísticos, con una moratoria en la concesión de licencias y con el cierre de aquellos que no cumplan con la legislación vigente.. Es posible que el proyecto cultural de 80 Mundosperviva en otro local de la ciudad; sus propietarios dicen que no se rinden.. Pues eso, que perder un espaciopara la lectura, la escritura y la cultura es, sin duda, un drama. Tanto como perder los edificios de viviendas, los de toda la vida.
Noticias de la Comunidad Valenciana en La Razón
