Jordi González ha reaparecido en televisión tras meses sin hacerlo tras conocerse que estuvo a punto de morir durante una estancia en Medellín (Colombia), cuando se vio afectado por una bacteria que le provocó una infección que obligó a inducirle el coma durante tres semanas.. «Lo que yo tenía era una bronconeumonía bilateral, que es la enfermedad que ha matado al papa Francisco, agravada con una crisis renal», explicaba a Semana el presentador, asegurando que es una afección con un alto índice de mortalidad.. Este fin de semana, en Col•lapse, dio más detalles: «Me fui unos días de vacaciones y fui víctima de una bacteria que había en el ambiente. Salí de casa por la mañana y, al volver, me faltaba el aire», contó, visiblemente más delgado. «Lo poco que me llegaba lo utilizaba mi cuerpo para el corazón y para mantenerme con vida. Y ya no recuerdo nada más hasta muchas semanas después».. Allí fue hospitalizado, en un centro que, dijo, le salvó la vida. «Me hicieron una traqueotomía, estaba sin poder hablar, con cinco sondas en el cuerpo y tres semanas en coma», relató.. «No bajaba de 40 de fiebre, la presión arterial estaba por los suelos, no oxigenaba y me indujeron al coma para poder alargar un poquito más la vida mientras un antibiótico hiciera efecto», indicó.. Sobre su familia, dijo: «Estaban semienterados de todo. Gente de mi familia se estará enterando en este programa que he estado tres semanas más allá que aquí».. Pasado el peor momento, y el riesgo de muerte, el presentador fue trasladado a España «en un avión medicalizado» para ingresar un tiempo más en una clínica.. Entonces, su principal «miedo» pasó a ser la posibilidad de que «perdiera la voz» porque la operación «toca las cuerdas vocales». Por último, dejó un curioso deseo: «Pido que cuando me muera suene en Col•lapse la canción de Always in my mind».
«Pido que cuando me muera suene en ‘Col•lapse’ la canción de ‘Always in my mind», indicó en TV3.
20MINUTOS.ES – Televisión
Jordi González ha reaparecido en televisión tras meses sin hacerlo tras conocerse que estuvo a punto de morir durante una estancia en Medellín (Colombia), cuando se vio afectado por una bacteria que le provocó una infección que obligó a inducirle el coma durante tres semanas.. «Lo que yo tenía era una bronconeumonía bilateral, que es la enfermedad que ha matado al papa Francisco, agravada con una crisis renal», explicaba a Semana el presentador, asegurando que es una afección con un alto índice de mortalidad.. Este fin de semana, en Col•lapse, dio más detalles: «Me fui unos días de vacaciones y fui víctima de una bacteria que había en el ambiente. Salí de casa por la mañana y, al volver, me faltaba el aire», contó, visiblemente más delgado. «Lo poco que me llegaba lo utilizaba mi cuerpo para el corazón y para mantenerme con vida. Y ya no recuerdo nada más hasta muchas semanas después».. Allí fue hospitalizado, en un centro que, dijo, le salvó la vida. «Me hicieron una traqueotomía, estaba sin poder hablar, con cinco sondas en el cuerpo y tres semanas en coma», relató.. «No bajaba de 40 de fiebre, la presión arterial estaba por los suelos, no oxigenaba y me indujeron al coma para poder alargar un poquito más la vida mientras un antibiótico hiciera efecto», indicó.. Sobre su familia, dijo: «Estaban semienterados de todo. Gente de mi familia se estará enterando en este programa que he estado tres semanas más allá que aquí».. Pasado el peor momento, y el riesgo de muerte, el presentador fue trasladado a España «en un avión medicalizado» para ingresar un tiempo más en una clínica.. Entonces, su principal «miedo» pasó a ser la posibilidad de que «perdiera la voz» porque la operación «toca las cuerdas vocales». Por último, dejó un curioso deseo: «Pido que cuando me muera suene en Col•lapse la canción de Always in my mind».