Existe una falsa idea generalizada de pensar que las especies de plantas y animales, el ser humano incluido, no han evolucionado en los últimos milenos mientras nosotros hemos poblado el planeta. Aunque ocurran de forma muy gradual e imperceptible en la corta vida de un mortal, ciertamente sí que se dan cambios notables en la mayor parte de la naturaleza.. wf_cms.rss.read_more. ]]>
Aunque ha sido utilizado durante siglos por los ganaderos castellano-manchegos, actualmente su población ha mermado considerablemente
Existe una falsa idea generalizada de pensar que las especies de plantas y animales, el ser humano incluido, no han evolucionado en los últimos milenos mientras nosotros hemos poblado el planeta. Aunque ocurran de forma muy gradual e imperceptible en la corta vida de un mortal, ciertamente sí que se dan cambios notables en la mayor parte de la naturaleza.. Además de los cruces genéticos, la adaptación al clima y la influencia del comportamiento y las costumbres, la intervención del ser humano también influye en evolución de los seres vivos. Seleccionamos los individuos más eficaces para tareas concretas y los reproducimos entre sí hasta obtener una raza perfeccionada para servirnos en ciertos trabajos.. Así, el trigo, los plátanos o las mandarinas salvajes de antes el periodo Neolítico en poco se parecen a los cultivos de los que disponemos en la actualidad. Y lo mismo ha ocurrido con el lobo, que a fuerza de domesticación e imponerle tareas específicas, hemos logrado crear nuevas razas de perro genéticamente preparadas para servirnos en un rol concreto.. Un ejemplar de lobo. Los ‘Homo sapiens’ somo una especie tan influyente quehemos sido capaces de moldear a través de la selección genética la evolución de animales, plantas y microorganismos desde que comenzaron la agricultura y la ganadería. Así, se han ido creado razas de perro propias de regiones concretas que no se ven en ninguna otra parte del mundo, como de la que hablaremos a continuación.. A través de las generaciones, los canes descendientes de la raza ‘collie’ europea utilizados para el pastoreo de ganado se fueron diferenciando regionalmente. En función de criterios del clima, la estética y su oficio específico, estos perros han evolucionado a través de la selección genética de intervención humana hasta obtener características físicas únicas.. En Castilla-La Mancha, por ejemplo, existe una preciosa raza conocida como “perro carea castellano-manchego”. Durante cientos de años se han utilizado como ayudantes para cuidar, vigilar y proteger al ganado en la región, pero en las últimas décadas la aparición de otra clase más moderna de ganadería los ha desplazado.. El número de perros ‘carea castellano-manchego’ ha disminuido considerablemente desde hace varios años, y algunos expertos alertan de que dentro de poco podrían llegar a entrar en ‘peligro de extinción’. La merma de ganadería extensiva no solo afecta a los pequeños propietarios, también tiene efecto en los animales.. Ovejas pastando. El término ‘carea’ significa dirigir el ganado, de ahí su nombre. La ‘Real Sociedad Canina de España’ define al carea castellano-manchego como un perro “rústico, de carácter noble, equilibrado, obediente e intuitivo, que puede mostrarse algunas veces algo reservón y desconfiado. Se trata de un perro que no muestra signos de agresividad alguna, y si se le presiona tiende a ser huidizo”.. Se suele utilizar por los pastores para que conduzcan ganados, normalmente de ovejas o cabras, son perros inteligentes con gran capacidad de concentración en la tarea que les es asignada. Según indican desde la asociación, se encuentran en toda Castilla-La Mancha, especialmente en Toledo. También aparece en las zonas más meridionales de Ávila y Madrid, así como en el área nororiental de Extremadura.. Desde la web ‘http://www.perrocareacastellano.com/’, especializada en la divulgación y promoción de este increíble perro de la región, recogen muchos vídeos y fotos grabados por los pastores utilizando al carea castellano-manchego.
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