Dani Sirera, el líder del grupo municipal del PP en Barcelona, informó este viernes, 8 de agosto, que fue víctima de un robo en la vía pública en el distrito de Sant Antoni. El suceso tuvo lugar tras una reunión con comerciantes y residentes para discutir el aumento de la inseguridad en el área. Según ha relatado, al volver a su motocicleta, que estaba aparcada en la intersección de las calles Viladomat y Tamarit, se percató de que la guantera había sido manipulada. Los delincuentes robaron sus gafas y el cargador de su iPhone. En la plataforma X, Sirera compartió lo ocurrido y expresó su agradecimiento a los trabajadores de la floristería Bausà Flors por haber encontrado el control del aparcamiento y notificárselo. «Barcelona no puede continuar de esta manera», declaró, expresando su pesar porque la ciudad se ha transformado, según sus palabras, en «un refugio para los criminales». El líder del partido exigió al alcalde Jaume Collboni que implemente acciones más firmes contra la criminalidad. Entre sus sugerencias, pidió que se asigne a la calle a los 80 agentes de la Guardia Urbana que actualmente están encargados de la vigilancia de los edificios municipales, y que sean reemplazados por seguridad privada. «Requerimos la mayor presencia policial en la calle para asegurar la seguridad de los habitantes de Barcelona y de los turistas», declaró. Este hecho ocurre en un escenario de creciente tensión en Sant Antoni, donde tanto residentes como comerciantes han estado informando durante meses sobre un empeoramiento de la convivencia, acompañado por un incremento de robos a transeúntes y negocios. Según afirman, la situación ha empeorado debido a las obras de renovación de la Ronda de Sant Antoni, que han dejado zonas con menos vigilancia.
«Es hora de que Collboni aborde de manera seria la cuestión de la seguridad en Barcelona», afirmó Sirera.
Dani Sirera, el líder del grupo municipal del PP en Barcelona, informó este viernes, 8 de agosto, que fue víctima de un robo en la vía pública en el distrito de Sant Antoni. El suceso tuvo lugar tras una reunión con comerciantes y residentes para discutir el aumento de la inseguridad en el área. Según ha relatado, al volver a su motocicleta, que estaba aparcada en la intersección de las calles Viladomat y Tamarit, se percató de que la guantera había sido manipulada. Los delincuentes robaron sus gafas y el cargador de su iPhone. En la plataforma X, Sirera compartió lo ocurrido y expresó su agradecimiento a los trabajadores de la floristería Bausà Flors por haber encontrado el control del aparcamiento y notificárselo. «Barcelona no puede continuar de esta manera», declaró, expresando su pesar porque la ciudad se ha transformado, según sus palabras, en «un refugio para los criminales». El líder del partido exigió al alcalde Jaume Collboni que implemente acciones más firmes contra la criminalidad. Entre sus sugerencias, pidió que se asigne a la calle a los 80 agentes de la Guardia Urbana que actualmente están encargados de la vigilancia de los edificios municipales, y que sean reemplazados por seguridad privada. «Requerimos la mayor presencia policial en la calle para asegurar la seguridad de los habitantes de Barcelona y de los turistas», declaró. Este hecho ocurre en un escenario de creciente tensión en Sant Antoni, donde tanto residentes como comerciantes han estado informando durante meses sobre un empeoramiento de la convivencia, acompañado por un incremento de robos a transeúntes y negocios. Según afirman, la situación ha empeorado debido a las obras de renovación de la Ronda de Sant Antoni, que han dejado zonas con menos vigilancia.
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