Semana complicada la que se avecina en Castilla y León por el riesgo de incendios debido a las altas temperaturas y el viento.. Un verano que, además, está siendo complicado, con entre diez y doce fuegos declarados al día, que se están apagando rápidamente gracias a la labor de los operativos contra el fuego, con uno muy importante además de «intencionado», según la Junta, que ha calcinado más de 2.200 hectáreas en la provincia de Ávila, aún sin extinguir, y donde se sigue trabajando para evitar que pueda volver a reproducirse.. Por ello, el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha pedido «sentido común» a los ciudadanos que disfrutan estos días de la naturaleza en la Comunidad y que se eviten comportamientos de riesgo.. Suárez-Quiñones ha pedido también la colaboración ciudadana, para que prevenir cualquier comportamiento de riesgo que pueda derivar en un incendio.. «Simplemente aplicar el sentido común y cuidar de que no se inicie ningún incendio», decía esta mañana el consejero en Burgos, mientras insistía en reclamar a también a los ciudadanos que «no consientan estos ataques al medio natural, que ponen en riesgo la vida de las personas».. Rehabitare. Suárez-Quiñones se expresaba así durante una visita a la localidad burgalesa de Rubena, donde avanzaba que los municipios de Milagros, Hortigüela, Royuela de Río Franco y Villaverde del Monte se han sumado al programa Rehabitare de la Junta de Castilla y León para la rehabilitación de viviendas de titularidad municipal destinadas a alquiler social.. Un programa, en marcha desde 2015, busca rehabilitar viviendas en desuso para ponerlas al servicio de aquellos que apuestan por vivir en el medio rural.. En el Rehabitare la Junta colabora con los ayuntamientos, también con las diputaciones y los obispados, para recuperar antiguos inmuebles, con proyectos cofinanzados entre la administración autonómica y los ayuntamientos y/o diputaciones, ha apuntado el consejero.. «Es fundamental, para atraer personas a los pequeños municipios, dar oportunidades de vivienda», decía, en declaraciones recogidas por Efe, de modo que las viviendas que rehabilitan luego se ofrecen en régimen de alquiler social y, además, la propia intervención genera actividad económica local pues son las empresas pequeñas de la zona las que se encargan de las obras.. En Castilla y León se han rehabilitado a través del programa Rehabitare 635 viviendas, y el objetivo es alcanzar las 700 cuando acabe la legislatura, con una inversión total de 44 millones de euros, ha indicado el consejero, quien ha puesto de ejemplo el proyecto de Rubena, con fondos del ejercicio 2024.. En este caso, Rehabitare ha servido para acondicionar una vivienda vinculada a explotación de la cantina, lo que ha permitido la instalación de una familia procedente de Argentina, que ahora se encarga del bar del pueblo, «un servicio que es muy difícil de prestar», señalaba, por su parte, Ismael Ruiz, quien advertía de que nadie quiere trasladarse a vivir en un pueblo, ocupándose de un establecimiento de hostelería, porque es un trabajo muy sacrificado, pero que si se les ofrece una vivienda es un «plus» que anima a que las familias se asienten en el medio rural con proyectos de vida a medio y largo plazo
Este verano se están declarando entre diez y doce incendios forestales al día en Castilla y León
Semana complicada la que se avecina en Castilla y León por el riesgo de incendios debido a las altas temperaturas y el viento.. Un verano que, además, está siendo complicado, con entre diez y doce fuegos declarados al día, que se están apagando rápidamente gracias a la labor de los operativos contra el fuego, con uno muy importante además de «intencionado», según la Junta, que ha calcinado más de 2.200 hectáreas en la provincia de Ávila, aún sin extinguir, y donde se sigue trabajando para evitar que pueda volver a reproducirse.. Por ello, el consejero de Medio Ambiente, Vivienda y Ordenación del Territorio de Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones, ha pedido «sentido común» a los ciudadanos que disfrutan estos días de la naturaleza en la Comunidad y que se eviten comportamientos de riesgo.. Suárez-Quiñones ha pedido también la colaboración ciudadana, para que prevenir cualquier comportamiento de riesgo que pueda derivar en un incendio.. «Simplemente aplicar el sentido común y cuidar de que no se inicie ningún incendio», decía esta mañana el consejero en Burgos, mientras insistía en reclamar a también a los ciudadanos que «no consientan estos ataques al medio natural, que ponen en riesgo la vida de las personas».. Suárez-Quiñones se expresaba así durante una visita a la localidad burgalesa de Rubena, donde avanzaba que los municipios de Milagros, Hortigüela, Royuela de Río Franco y Villaverde del Monte se han sumado al programa Rehabitare de la Junta de Castilla y León para la rehabilitación de viviendas de titularidad municipal destinadas a alquiler social.. Un programa, en marcha desde 2015, busca rehabilitar viviendas en desuso para ponerlas al servicio de aquellos que apuestan por vivir en el medio rural.. En el Rehabitare la Junta colabora con los ayuntamientos, también con las diputaciones y los obispados, para recuperar antiguos inmuebles, con proyectos cofinanzados entre la administración autonómica y los ayuntamientos y/o diputaciones, ha apuntado el consejero.. «Es fundamental, para atraer personas a los pequeños municipios, dar oportunidades de vivienda», decía, en declaraciones recogidas por Efe, de modo que las viviendas que rehabilitan luego se ofrecen en régimen de alquiler social y, además, la propia intervención genera actividad económica local pues son las empresas pequeñas de la zona las que se encargan de las obras.. En Castilla y León se han rehabilitado a través del programa Rehabitare 635 viviendas, y el objetivo es alcanzar las 700 cuando acabe la legislatura, con una inversión total de 44 millones de euros, ha indicado el consejero, quien ha puesto de ejemplo el proyecto de Rubena, con fondos del ejercicio 2024.. En este caso, Rehabitare ha servido para acondicionar una vivienda vinculada a explotación de la cantina, lo que ha permitido la instalación de una familia procedente de Argentina, que ahora se encarga del bar del pueblo, «un servicio que es muy difícil de prestar», señalaba, por su parte, Ismael Ruiz, quien advertía de que nadie quiere trasladarse a vivir en un pueblo, ocupándose de un establecimiento de hostelería, porque es un trabajo muy sacrificado, pero que si se les ofrece una vivienda es un «plus» que anima a que las familias se asienten en el medio rural con proyectos de vida a medio y largo plazo
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