La Guardia Civil ha investigado a 22 personas como miembros de una misma red criminal dedicada a traficar presuntamente con medicamentos estupefacientes en la zona del Mar Menor, según informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.
La investigación, enmarcada en la operación ‘Prazo’, arrancó el pasado noviembre cuando la Inspección de Farmacia de la Comunidad denunció unas supuestas anomalías por hiperprescripción de medicamentos analgésicos y psicótropos de unas conocidas marcas comerciales.
Especialistas en Policía Judicial averiguaron que la venta de este tipo de medicamentos había aumentado exponencialmente en farmacias de la comarca del Mar Menor.
Las pesquisas condujeron hasta un consultorio médico ubicado en la zona donde, al parecer, se estaban expidiendo recetas de medicamentos normalmente utilizados para patologías psiquiátricas, para los que son necesarios la identificación mediante el Documento Nacional de Identidad.
Los guardias civiles averiguaron que dos de los pacientes se encontraban cumpliendo penas de prisión, lo que hacía imposible que acudieran personalmente a la farmacia a comprar los medicamentos que, por otro lado, recibían a través de los canales establecidos por el propio centro penitenciario.
La Guardia Civil averiguó que en seis meses se habían prescrito más de 1.500 envases de psicofármacos con compuestos en benzodiacepinas, entre otros.
Según se desprende de la investigación, el médico investigado llegó a prescribir a alguno de los pacientes hasta 10 envases de este tipo de medicamentos al mes, cuando solo necesitaban tres.
La operación ‘Prazo’ ha culminado recientemente con la desarticulación de un supuesto grupo criminal, formado por 22 personas, que han sido investigadas como presuntas autoras de delitos contra la salud pública, por tráfico de estupefacientes; de falsedad documental y de pertenencia a grupo criminal.
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La Guardia Civil ha investigado a 22 personas como miembros de una misma red criminal dedicada a traficar presuntamente con medicamentos estupefacientes en la zona del Mar Menor, según informaron fuentes de la Benemérita en un comunicado.. La investigación, enmarcada en la operación ‘Prazo’, arrancó el pasado noviembre cuando la Inspección de Farmacia de la Comunidad denunció unas supuestas anomalías por hiperprescripción de medicamentos analgésicos y psicótropos de unas conocidas marcas comerciales.. Especialistas en Policía Judicial averiguaron que la venta de este tipo de medicamentos había aumentado exponencialmente en farmacias de la comarca del Mar Menor.. Las pesquisas condujeron hasta un consultorio médico ubicado en la zona donde, al parecer, se estaban expidiendo recetas de medicamentos normalmente utilizados para patologías psiquiátricas, para los que son necesarios la identificación mediante el Documento Nacional de Identidad.. Los guardias civiles averiguaron que dos de los pacientes se encontraban cumpliendo penas de prisión, lo que hacía imposible que acudieran personalmente a la farmacia a comprar los medicamentos que, por otro lado, recibían a través de los canales establecidos por el propio centro penitenciario.. La Guardia Civil averiguó que en seis meses se habían prescrito más de 1.500 envases de psicofármacos con compuestos en benzodiacepinas, entre otros.. Según se desprende de la investigación, el médico investigado llegó a prescribir a alguno de los pacientes hasta 10 envases de este tipo de medicamentos al mes, cuando solo necesitaban tres.. La operación ‘Prazo’ ha culminado recientemente con la desarticulación de un supuesto grupo criminal, formado por 22 personas, que han sido investigadas como presuntas autoras de delitos contra la salud pública, por tráfico de estupefacientes; de falsedad documental y de pertenencia a grupo criminal.
La Inspección de Farmacia de la Comunidad denunció unas supuestas anomalías por hiperprescripción de medicamentos analgésicos y psicótropos