La Policía Local de Málaga ha intervenido este viernes en una fiesta sin autorización organizada en una vivienda ubicada en la Carretera de Coín, en el distrito malagueño de Churriana, que había sido alquilada.
La organización de este evento había sido identificada a través de las redes sociales por agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP) en el marco de la labor investigadora que se lleva a cabo en estas fechas para detectar la posible organización de fiestas en espacios sin autorización.
En este caso, las interacciones en redes se han reactivado durante la pasada madrugada con indicaciones sobre la ubicación exacta del evento, para cuyo acceso se cobraban 25 euros por entrada, han indicado en un comunicado.
Así, varias unidades de la Policía Local se han personado a primera hora de la mañana en el inmueble, constatando que el interior podría haber más de un centenar de personas. Además, se han recibido varias llamadas a la Sala del 092 por molestias por ruido y la presencia de vehículos mal estacionados. Al dispositivo policial se han sumado efectivos del GIP y del Grupo Operativo de Apoyo (GOA).
La Policía ha identificado a la persona responsable del evento, que será denunciada por dos infracciones en base a la Ley 13/1999, de 15 de diciembre, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Andalucía: una por ejercer una actividad de ocio sin la preceptiva autorización y otra por impedir u obstaculizar las funciones de inspección de los agentes.
Además, durante la intervención, se ha procedido a denunciar a los propietarios de diez vehículos mal estacionados -cuatro de ellos han sido retirados por la grúa-, así como a varias personas por hacer las necesidades fisiológicas en la vía pública.
De igual modo, se han levantado cuatro actas por tenencia de sustancias estupefacientes y una persona ha sido detenida por un presunto delito contra la salud pública. Durante toda la mañana se ha impedido la entrada al inmueble a más personas, mientras son identificadas las que van saliendo. La vigilancia se mantendrá de forma continuada en la zona.
En paralelo, también se ha procedido a denunciar al responsable de otra fiesta privada en otra vivienda en la calle Canal, en el distrito Churriana, cuyo organizador será igualmente denunciado por ejercer una actividad de ocio sin autorización. En este caso, el responsable ha procedido a desalojar tras ser advertido por los agentes.
RECOMENDACIONES
En este sentido, desde el Consistorio han recordado en un comunicado el bando dictado por el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, con motivo de la Navidad y Fin de Año, que aconseja a la ciudadanía que se informe previamente de si las fiestas y cotillones de carácter ocasional o extraordinario a las que pretendan asistir cuentan con la preceptiva autorización municipal previa; y a los organizadores, que ofrezcan toda la información y publicidad necesaria sobre la autorización previa y condiciones del evento.
En este sentido, se recuerda a los organizadores de actividades recreativas y eventos de carácter multitudinario (cotillones, conciertos y fiestas juveniles) la prohibición de colocar publicidad en cualquier formato en farolas, semáforos y demás elementos del mobiliario urbano, así como en otros lugares de la vía pública no autorizados y fachadas que den a ésta, y la necesidad de que en tales eventos se cumplan todos los requisitos reglamentarios y se obtengan las preceptivas autorizaciones administrativas con antelación suficiente a la celebración de los mismos.
Un detenido está presente, y el individuo responsable será denunciado por llevar a cabo actividades recreativas no autorizadas y obstruir o impedir los deberes de inspección.
El viernes, la Policía Local de Málaga interrumpió una fiesta no autorizada celebrada en una casa alquilada en la Carretera de Coín en el distrito de Churriana. Agentes del Grupo de Investigación y Protección (GIP) detectaron la promoción del evento en las redes sociales como parte de los esfuerzos en curso para identificar reuniones sin licencia. Las interacciones en las redes sociales se reanudaron esa mañana, revelando la ubicación precisa y una tarifa de entrada de 25 euros, según una declaración oficial. Varias unidades policiales llegaron a la propiedad en las primeras horas, observando que probablemente había más de cien personas dentro. Además, se han recibido varias llamadas a la sala 092 con respecto a disturbios de ruido y vehículos mal estacionados. La policía ha sido reforzada por el GIP y el Grupo de Apoyo Operativo (GOA). Han identificado al individuo detrás del incidente, que enfrentará cargos por dos violaciones de la Ley 13/1999, de 15 de diciembre, de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas de Andalucía: uno por operar una actividad de ocio sin el permiso requerido, y otro por obstruir o impedir las tareas de inspección de los oficiales. Además, durante la operación, los propietarios de diez vehículos estacionados incorrectamente fueron citados -cuatro de los cuales fueron remolcados- como varias personas por orinar o defecar en público. También se resolvieron cuatro casos de posesión de drogas, y una persona fue arrestada por un presunto delito contra la salud pública. Durante la mañana, se ha impedido que más personas entren en el edificio, mientras se identifica a los que salen. Se mantendrá una vigilancia continua en el área. Mientras tanto, la persona responsable de otra reunión privada en otra casa en Canal Street en el distrito de Churriana también ha sido denunciada, y su organizador también enfrentará cargos por realizar una actividad de ocio no autorizada. Aquí, la parte responsable ha seguido adelante con el desalojo a pesar de las advertencias de los agentes. Esto es una recomendación. En este contexto, el Consistorio ha reiterado en una declaración el aviso del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, emitido para Navidad y Nochevieja. Insta a los ciudadanos a comprobar de antemano si las fiestas ocasionales o extraordinarias a las que planean asistir tienen la autorización municipal previa requerida, y a los organizadores a proporcionar todos los detalles y publicidad sobre la autorización y las condiciones del evento. Además, se recuerda a los organizadores de actividades recreativas y grandes reuniones (como carnavales, conciertos y fiestas juveniles) la prohibición de colocar anuncios en cualquier forma en faroles, semáforos, otros muebles callejeros, áreas públicas no autorizadas de carreteras o fachadas de edificios. También deben garantizar que todos los eventos cumplan con las normas reglamentarias y obtener los permisos administrativos necesarios con suficiente antelación.
Noticias de Andalucía en La Razón
